¿Cómo estar preparado para el Camino Inca?

Guía con respuestas a las preguntas más recurrentes.

El increíble Camino Inca es una travesía ancestral que serpentea entre las majestuosas montañas de los Andes peruanos. Es mucho más que un simple recorrido; es una experiencia mística, una mezcla vertiginosa de historia antigua y naturaleza salvaje. Desde las ruinas incas hasta las vistas panorámicas que te dejan sin aliento, este camino es un viaje alucinante a través del tiempo y el espacio.

¿Qué es el Camino Inca?

El Camino Inca, también conocido como Qhapaq Ñan en quechua, es una antigua red de caminos construida por los incas en el territorio andino de América del Sur, específicamente en los actuales países de Perú, Ecuador, Bolivia, Chile y Argentina. Estos caminos conectaban vastas regiones del imperio incaico y se utilizaban para diversos propósitos, como el transporte de personas, bienes y mensajes, así como para propósitos militares y religiosos.

¿Recorreré todo el camino?

No, solo el tramo más famoso del Camino Inca,  el que conduce a la ciudadela de Machu Picchu, ubicada en los Andes peruanos. Este tramo comienza en el Valle Sagrado de los Incas, cerca de la ciudad de Cusco, y recorre aproximadamente 43 kilómetros a través de montañas, valles y bosques hasta llegar a la majestuosa ciudadela incaica.

El Camino Inca hacia Machu Picchu es famoso por su impresionante paisaje, su rica historia y su importancia cultural. Es una de las rutas de trekking más populares del mundo y atrae a miles de visitantes cada año que buscan explorar los antiguos senderos incas y maravillarse con las vistas panorámicas de los Andes.

¿Qué tan difícil es el Camino Inca?

En general, el Camino Inca no es técnicamente difícil en términos de escalada o habilidades especializadas, pero requiere una buena condición física, preparación adecuada y capacidad para enfrentar los desafíos asociados con la altitud y el terreno. Muchas personas de diferentes edades y niveles de condición física completan con éxito el Camino Inca cada año. Algunos aspectos que influyen en la dificultad son:

Altitud. El trekking comienza a una altitud considerable en Cusco, aproximadamente 3400 metros sobre el nivel del mar y alcanza altitudes superiores durante la caminata. La altitud puede causar problemas de aclimatación y dificultad para respirar, especialmente para aquellos que no están acostumbrados a altitudes elevada

Distancia y terreno. El Camino Inca tradicional tiene una longitud de aproximadamente 43 kilómetros y abarca una variedad de terrenos, que incluyen tramos empinados, escaleras de piedra, caminos estrechos y condiciones climáticas variables. La caminata puede durar entre 2 y 4 días, dependiendo de la ruta elegida y el ritmo de caminata.

Condiciones climáticas. El clima en los Andes peruanos puede ser impredecible, con cambios repentinos de temperatura, lluvias y niebla. Esto puede afectar la dificultad de la caminata y la comodidad de los excursionistas.

Peso de la mochila. Llevar una mochila pesada con equipo y suministros puede aumentar la dificultad de la caminata, especialmente en terrenos empinados y difíciles.

¿Es necesaria la aclimatación para el camino inca?

Sí, la aclimatación es muy importante para el Camino Inca. La aclimatación permite que tu cuerpo se ajuste gradualmente a la altitud y reduzca el riesgo de sufrir problemas relacionados con la altura, como el mal de altura o soroche.

Es recomendable pasar al menos un par de días en Cusco antes de comenzar la caminata para permitir que tu cuerpo se adapte a la altitud. Durante este tiempo, es importante descansar, mantenerse bien hidratado, evitar el consumo excesivo de alcohol y alimentos pesados, y evitar el esfuerzo físico intenso.

Además, es aconsejable realizar caminatas cortas y de baja intensidad en los alrededores de Cusco durante la aclimatación para ayudar a tu cuerpo a adaptarse gradualmente a la altitud. Esto te ayudará a minimizar el riesgo de sufrir efectos negativos de la altitud durante el trekking por el Camino Inca.

¿Cómo prepararse físicamente? 

Si bien es cierto que las siguientes recomendaciones no tienen carácter de obligatoriedad. Puedes tomar en cuenta estos consejos específicos para prepararte físicamente:

Entrenamiento cardiovascular. Realiza actividades cardiovasculares como correr, nadar, andar en bicicleta o usar una máquina elíptica para mejorar tu resistencia cardiovascular. Esto te ayudará a mantener un ritmo constante durante largas caminatas y a afrontar las subidas y bajadas del terreno.

Entrenamiento de fuerza. Incorpora ejercicios de fuerza en tu rutina, como levantamiento de pesas, ejercicios de cuerpo completo con pesas corporales o ejercicios de resistencia con bandas elásticas. Esto fortalecerá tus músculos, lo que te ayudará a llevar una mochila pesada y a enfrentarte a terrenos irregulares.

Entrenamiento de piernas. Dado que gran parte del Camino Inca implica caminar largas distancias, es importante fortalecer tus piernas. Realiza ejercicios como sentadillas, estocadas, elevaciones de pantorrillas y step-ups para fortalecer los músculos de las piernas y mejorar tu resistencia.

Entrenamiento de equilibrio y estabilidad. Debido a que el terreno del Camino Inca puede ser irregular y rocoso, es útil mejorar tu equilibrio y estabilidad. Realiza ejercicios como planchas, tablas laterales y equilibrios sobre una pierna para mejorar tu estabilidad.

¿Qué nivel de condición física se requiere?

El Camino Inca es una caminata desafiante que requiere un buen nivel de condición física y resistencia. Aunque no se requiere ser un atleta de élite, es importante estar preparado para enfrentar los desafíos del terreno, la altitud y la duración de la caminata. Aquí están los requisitos físicos recomendados para completar con éxito el Camino Inca:

Buena condición cardiovascular. Se requiere una buena salud cardiovascular para poder caminar largas distancias a un ritmo constante durante varios días.

Fuerza y resistencia muscular. Es necesario tener suficiente fuerza y resistencia muscular en las piernas, especialmente en los cuádriceps, pantorrillas y glúteos, para poder subir y bajar escaleras de piedra y caminar sobre terrenos irregulares durante largos períodos de tiempo.

Flexibilidad. La flexibilidad adecuada puede ayudar a prevenir lesiones musculares y articulares durante el trekking. Realizar ejercicios de estiramiento regularmente puede mejorar la flexibilidad y la movilidad articular.

Mentalidad positiva y determinación. Además de la preparación física, es importante tener una mentalidad positiva, determinación y voluntad para superar los desafíos que puedan surgir durante el trekking.

Al cumplir con estos requisitos físicos y estar bien preparado tanto física como mentalmente, estarás en una mejor posición para completar con éxito el desafiante pero gratificante trekking por el Camino Inca hacia Machu Picchu.

¿Cómo comer en el camino inca?

Preparar tu alimentación antes y durante el Camino Inca es esencial para mantener la energía y la resistencia durante la caminata. Aquí tienes algunas pautas:

Antes de la caminata:

Hidratación. Comienza a aumentar tu consumo de agua varios días antes de comenzar la caminata para asegurarte de estar bien hidratado. Evita el alcohol y las bebidas con cafeína, ya que pueden causar deshidratación.

Carbohidratos. Consume una dieta rica en carbohidratos complejos, como cereales integrales, arroz, pasta, quinua y patatas, para almacenar glucógeno en tus músculos y proporcionar energía durante la caminata.

Proteínas. Incluye fuentes magras de proteínas, como pollo, pavo, pescado, tofu, legumbres y huevos, para ayudar a reparar y fortalecer los músculos durante el período de entrenamiento previo a la caminata.

Grasas saludables. Incorpora grasas saludables en tu dieta, como aguacate, frutos secos, semillas y aceite de oliva, para proporcionar energía adicional y ayudar a mantener la sensación de saciedad.

Snacks nutritivos. Empaca snacks saludables y nutritivos para llevar contigo durante la caminata, como frutas frescas, frutos secos, barras de granola, galletas integrales y chocolate oscuro.

Durante la caminata:

Hidratación constante. Bebe agua regularmente durante la caminata para mantenerte hidratado y compensar la pérdida de líquidos causada por el ejercicio y la altitud.

Snacks energéticos. Consume snacks energéticos y de rápida digestión para reponer los carbohidratos y mantener tus niveles de energía, como barras de energía, frutas deshidratadas, galletas integrales y bebidas deportivas.

Comidas equilibradas. Opta por comidas equilibradas y nutritivas en las paradas para el almuerzo y la cena, que incluyan una combinación de carbohidratos, proteínas y grasas saludables para reponer los nutrientes perdidos y recuperar la energía.

Evita alimentos pesados. Evita las comidas pesadas y grasosas que puedan dificultar la digestión y causar malestar estomacal durante la caminata.

Suplementos opcionales. Considera llevar suplementos opcionales como geles energéticos, tabletas de electrolitos o sales de rehidratación oral para ayudar a mantener el equilibrio electrolítico y prevenir la deshidratación.

Al seguir estas pautas nutricionales antes y durante el Camino Inca, podrás mantener tus niveles de energía, mejorar tu rendimiento y disfrutar de una experiencia más cómoda y satisfactoria durante el trekking.

¡Ya me anime a hacer el Camino Inca! ¿Qué más debo considerar?

Te ofrecemos una lista de consejos para tener en cuenta:

Reserva con anticipación. El Camino Inca tiene un cupo limitado de visitantes por día, así que asegúrate de reservar tu espacio con mucha anticipación a través de una agencia autorizada.

Equipo adecuado. Asegúrate de llevar ropa y calzado adecuados para caminar en diferentes condiciones climáticas. No olvides empacar una mochila cómoda y ligera con los elementos esenciales, como agua, protector solar, repelente de insectos y botiquín de primeros auxilios.

Respeta el medio ambiente. El Camino Inca es un sitio arqueológico y natural protegido, así que asegúrate de seguir las normas y regulaciones establecidas para preservar su belleza y conservación.

Disfruta del viaje. El Camino Inca es una experiencia única e inolvidable. Tómate el tiempo para disfrutar del paisaje, aprender sobre la cultura inca y conectar con la naturaleza mientras te aventuras hacia Machu Picchu. La idea no es ir rápido sino disfrutar de cada pequeño paso.

Escoge una agencia confiable. Si decides hacer el trekking con una agencia, elige una que sea confiable y tenga experiencia en la organización de viajes al Camino Inca. Asegúrate de que ofrezcan servicios de calidad y respeten los estándares de seguridad y sostenibilidad.

Al seguir estos consejos y prepararte adecuadamente, estarás mejor equipado para completar con éxito el desafiante pero gratificante Camino Inca hacia Machu Picchu. Prepárate para sumergirte en un viaje al borde de la realidad, donde los límites entre lo tangible y lo intangible se desvanecen. El Camino Inca te espera, con sus misterios por desentrañar y sus paisajes por conquistar.